Para vivir, hay que correr el riesgo de poder perder.
Equivocarse hasta caer,
llegar al fondo de mi ser.
Si me animo y
si no puedo…Si me atrevo y
si no llego…
Si te pierdo y no te encuentro…
Si me escapo, o me quedo ciego.
¿Cual es la forma más clara y segura,
elegir bien y que no queden dudas?
Yo sigo probando, mientras voy pensando,
qué hacer.